Acudí al Método TOMATIS® por la falta de interés en el estudio de mi hijo adoptivo, principalmente por su dificultad en el inglés. Cuando comenzó la estimulación, estaba a mitad del año escolar y pensábamos que le tocaría repetirlo.
Su comportamiento en general era de aparente desinterés y apatía, se mostraba malgeniado y peleaba frecuentemente con su hermano menor. A medida que transcurrían las sesiones de la estimulación se fue haciendo responsable con sus tareas ,mejoró su concentración y su deseo de pasar al año escolar siguiente. Al final logró pasar a sexto, comparte más con su hermano y valora todo lo que tiene.